Gracias por estar

Hola a todos, gracias por acercarte a mi blog, en el voy volcando un poco lo que me pasa a diario y cosas que voy pensando. Como muchos sueño con algún día escribir un libro o varios, pero por ahora con el tiempo que tengo voy a conformarme con estos pequeños post y espero que les sirvan para repensar algunas cosas o reírse, lo que no es poco.
Soy mama de tres pequeños, trabajo de docente, doy filosofia en el ultimo año de la escuela secundaria y ademas (xq me sobraba tiempo, jajaja) estudio, y ademas tenemos con mi marido un pequeño emprendimiento de platería artesanal, donde mechamos metales y soguería .
Como la mayoría de ustedes me siento culpable mucho tiempo y desconcertada otro tanto en mi papel de madre y trato de hacer todo para que esten bien y muchas veces me dejo influenciar demasiado por los blog de hágalo que es fácil... Bueno espero tenerlos seguido por aqui y si algo les gusta lo pueden comentar o compartir, besos nos leemos...

martes, 20 de enero de 2015

Esa ¿sensación? de estar en falta y ser castigada por no estar....


Y a ustedes, les pasa lo mismo, cuando hacen algo en horarios diferentes se sienten culpables y notan que la casa (familia) la esta castigando por no haber estado o por no estar como ellos  quisieran?

Desde hace tiempo me da vueltas en la cabeza la idea y la sensación de que se me castiga por no estar en casa lo suficiente o por estar ocupada en determinadas tareas que no son las propias de una AMA DE CASA... y lo pongo en mayúsculas y es porque son esas tareas propias de los principios del siglo anterior.
Cuando salimos de casa para hacer tramites o para trabajar o ir al medico y volvemos a casa, la casa esta mas que patas para arriba, nada se ha hecho y si se ha hecho se ha hecho de forma tal que nosotras sintamos que no era el DEBER de quien lo hizo,hacerlo...
A mi esta "sensación" me embarga cada vez que me toca no estar para el almuerzo, que ademas en épocas de clases, representa buscar a uno a jardín (este año serán 2) y preparar a la mayor para la escuela, ademas que mi marido sale a esa hora a trabajar.
Ahora bien, esta sensación también llega cuando tengo que ir a reuniones de trabajo, o cuando me toca corregir pilas de exámenes o trabajos prácticos o cuando tengo que estudiar y entregar trabajos.
Cuando la mayor era chiquita, estaba celosa de mi maquina de coser, no me dejaba sentar, esperaba que la encendiera para querer cosas o llorar por algún motivo lo que hacia que dejara y así nunca terminara lo que había empezado. Ahora sigue igual pero a la maquina de coser los tres le suman la computadora, casi diría que la odian. Y es  que cuando tengo cosas que hacer en la maquina inventan las mil y una formas de interrumpirme, ensuciarse, pelearse y demás...
Y es entonces cuando nosotras, MAMA antes que cualquier otra cosa, y con un legado de culpas y deberes de miles años provenientes de miles de años, nos sentimos terribles, porque no estamos cumpliendo con nuestro DEBER de mama y de esposa y de ama de casa... Pero donde esta escrito ese deber, quien nos lo exige? porque la mayoría de nosotras esta casada con hombres que celebran nuestros logros y nos impulsan y acompañan a crecer profesionalmente, pero que inconscientemente esperan que seamos como Maru Botana, jajaja, que trabaja, cocina, tiene embarazos sonrientes y puede cumplir con todo sobre rollers... La televisión, el cine y generaciones de madres abnegadas y mártires han hecho que nosotras seamos una generación de personas que estamos siempre insatisfechas y culposas por no poder estar en todos lados y hacer todo perfecto como para publicar en un blogg...

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